Se trata de 14 unidades de transporte urbano afectadas durante el paro del 10 de abril. La fiscalía ordenó registros, toma de testimonios y revisión de cámaras de seguridad.
Una fiscal de Bahía Blanca inició una investigación sobre los destrozos que sufrieron 14 colectivos urbanos de pasajeros durante el paro nacional del 10 de abril, convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT). La Unión Tranviarios Automotor (UTA) decidió no adherir a la medida, lo que derivó en ataques a las unidades de las empresas locales Rastreador Fournier, San Gabriel y Bahía SAPEM.
En total, seis colectivos de Rastreador Fournier y seis de San Gabriel sufrieron roturas de vidrios, mientras que Bahía SAPEM registró daños en dos de sus unidades. Ante este panorama, los empresarios del transporte decidieron suspender el servicio en conjunto con el gremio local.
Según fuentes judiciales, la fiscal ordenó el registro de los daños y la identificación de los elementos utilizados para causarlos. Además, se solicitó la toma de testimonios y la revisión de cámaras de seguridad, tanto públicas como privadas, que pudieran arrojar información relevante sobre los hechos.
La fiscalía también dispuso la colaboración de la Policía de la Delegación Departamental de Investigaciones y de las comisarías con jurisdicción en las zonas afectadas. No se descarta que otras fuerzas de seguridad puedan ser llamadas a colaborar en la investigación.






