Conmebol expulsó al Rojo tras los graves disturbios en Avellaneda. El ex ministro de Seguridad bonaerense, hoy dirigente del club, quedó en la mira por la falla en el control interno.

Independiente fue eliminado de la Copa Sudamericana por decisión de la Conmebol, que sancionó al club luego de los incidentes violentos en su estadio durante el duelo con Universidad de Chile. El ente dio por concluido el encuentro 1-1, clasificó al equipo chileno y aplicó un castigo ejemplar: siete partidos internacionales sin público y una multa de 100 mil dólares.

La responsabilidad apunta a la comisión directiva que lideran Néstor Grindetti y Cristian Ritondo, ex titular de Seguridad bonaerense, quien basó su carrera política en la “mano dura” pero no pudo garantizar la seguridad dentro del Libertadores de América. La violencia estalló en las tribunas, donde actuaba personal privado contratado por el club, mientras la policía permanecía afuera.

El ministro provincial Javier Alonso acusó al club por abrir portones internos que facilitaron el ataque a los hinchas chilenos, lo que evidenció un colapso total del operativo. El escándalo estalla en medio de la campaña electoral y salpica a Ritondo, aliado reciente de La Libertad Avanza, donde la seguridad es bandera central.