El gobernador neuquino promulgó la ley que obliga a funcionarios a someterse a pruebas toxicológicas y crea mecanismos de evaluación y sanción. Con esta medida, Neuquén se consolida como una provincia con tolerancia cero al consumo y los vínculos con el narcotráfico dentro del Estado.
El gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, promulgó una nueva ley que obliga a los funcionarios públicos a someterse a controles antidrogas periódicos. La normativa busca garantizar que quienes ocupan cargos en la administración mantengan un comportamiento íntegro y transparente, alineado con los estándares del modelo neuquino.
Además de las pruebas toxicológicas, la ley establece mecanismos de evaluación y sanción para quienes incumplan las normas, reforzando la disciplina y la responsabilidad dentro del Estado. La medida se enmarca en una política de tolerancia cero frente a conductas que puedan comprometer la gestión pública.
Con esta iniciativa, Neuquén se consolida como una provincia comprometida con la transparencia y la seguridad institucional, asegurando que los vínculos con el narcotráfico o el consumo de drogas no tengan lugar en la administración pública.






