En un encuentro en La Rural, el presidente defendió el equilibrio fiscal alcanzado por su gestión y cuestionó la política económica del macrismo, además de apuntar contra actores del poder político y empresarial.

El presidente Javier Milei volvió a respaldar su rumbo económico al afirmar que su administración alcanzó el equilibrio fiscal y mantiene “apenas déficit de cuenta corriente”. Al hablar ante empresarios en el cierre de un encuentro de líderes en La Rural, planteó que la corrección de las cuentas públicas es indispensable para estabilizar la economía.

Durante su intervención, tomó distancia del ex mandatario Mauricio Macri al señalar que en 2017 “no se hizo el ajuste fiscal” y que esa gestión “solo corrigió con endeudamiento”. A diferencia de aquello, aseguró que su gobierno realizó un recorte equivalente a 15 puntos del PBI para ordenar el Tesoro.

Milei defendió nuevamente el esquema de flotación administrada que utiliza su gobierno para regular el tipo de cambio. Explicó que la estrategia de bandas cambiarias funciona como un amortiguador para evitar saltos bruscos y consolidar un sendero de estabilidad de precios, con el objetivo central de “no ver más inflación en Argentina”.

El presidente también apuntó contra sectores del poder político y económico que, según sostuvo, buscan frenar el programa oficial. Afirmó que su compromiso es con “47,5 millones de argentinos” y no con “tres o cuatro atorrantes del círculo rojo que vivieron de empobrecer al país”.

En ese marco, reiteró que su continuidad dependerá exclusivamente de los resultados de su gestión y afirmó que, si no logra resolver los problemas del país, “estaría muy bien que no le renueven el contrato” en 2027. Además, celebró el desempeño electoral de su fuerza política, al considerar que los comicios legislativos representaron “una señal de fortaleza”.

Por último, cuestionó el sistema de boletas y denunció el uso de “listas fantasma” durante las elecciones. Aun así, destacó que su espacio ganó en la provincia de Buenos Aires y remarcó que, según su interpretación de los resultados, “la paliza hubiera sido más grande” sin esas maniobras.