La ministra de Seguridad aseguró que el oficialismo buscará sancionar el proyecto antes de que finalice el año y defendió los cambios como necesarios para modernizar el mercado de trabajo.

La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó que el gobierno tiene como objetivo sancionar la reforma laboral antes de fin de año, y remarcó que se trata de una prioridad dentro de la agenda legislativa impulsada por el oficialismo.

En declaraciones públicas, Bullrich sostuvo que el proyecto apunta a ordenar el sistema laboral, reducir la litigiosidad y generar condiciones más favorables para la creación de empleo formal, especialmente en el sector privado.

La funcionaria reconoció que el debate en el Congreso será complejo, pero expresó confianza en que habrá voluntad política para avanzar con los cambios propuestos, incluso mediante negociaciones con bloques aliados.

Según explicó, la iniciativa forma parte de un paquete de reformas estructurales que el gobierno considera clave para mejorar la competitividad de la economía y acompañar el rumbo general de las políticas económicas.

Bullrich también cuestionó a sectores opositores y sindicales que rechazan el proyecto, al señalar que “defienden un sistema que dejó afuera a millones de trabajadores” y que no responde a la realidad actual del mercado laboral.

El oficialismo busca acelerar los tiempos parlamentarios para lograr la sanción antes del cierre del período ordinario, en un contexto de tensión política y debate intenso dentro y fuera del Congreso.