El zapallo es uno de esos alimentos que combinan sabor, versatilidad y un perfil nutricional que vale oro. Fácil de conseguir y de preparar, se adapta a sopas, purés, guisos, tartas o incluso al horno, convirtiéndose en una opción ideal para sumar verduras sin esfuerzo. Su aporte de nutrientes lo vuelve un aliado perfecto para quienes buscan comer más saludable sin complicarse.

Uno de los mayores beneficios del zapallo es su contenido de betacarotenos, el pigmento que le da su color anaranjado y que el cuerpo transforma en vitamina A. Este nutriente es clave para la salud de la vista, el cuidado de la piel y el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Además, su combinación de antioxidantes ayuda a combatir el daño celular y contribuye a prevenir el envejecimiento prematuro.

Otro punto fuerte es que el zapallo es liviano, bajo en calorías y rico en agua y fibra, lo que lo hace ideal para mejorar la digestión y generar saciedad. Esto puede ayudar a controlar el apetito y a mantener un peso saludable, sin resignar un plato rico. También es una buena opción para quienes necesitan cuidar el colesterol o mejorar el tránsito intestinal, gracias a su aporte de fibra soluble.

Por último, el zapallo aporta minerales importantes como potasio y magnesio, que colaboran con la salud cardiovascular, la presión arterial y el funcionamiento muscular. Su textura suave y su sabor amable lo convierten en un alimento apto para todas las edades, desde niños hasta adultos mayores. En definitiva, sumar zapallo a la dieta es una decisión simple que puede traer beneficios reales y sostenidos para el bienestar.